Las 6 medidas más absurdas de Ada Colau

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, lleva poco más de un año liderando el Ayuntamiento de la Ciudad Condal, tiempo suficiente para llevar a cabo algunas medidas poco convencionales que los barceloneses ya han podido experimentar.

De esta forma, estaría siguiendo el ejemplo de su amiga Manuela Carmena, jefa del Gobierno municipal en Madrid, otra de las llamadas «alcaldías del cambio» que siempre pregonan los dirigentes de Podemos y que también ha puesto en práctica algunas propuestas llamativas y rocambolescas.

6. Prohibido ver a España en la Eurocopa

Antes de la celebración de la Eurocopa de Francia de este año, Colau anunció la prohibición de la instalación de pantallas gigantes en espacios públicos para ver los partidos de la Selección española de fútbol, algo que sí que se podría hacer durante el Mundial de 2010.

El Gobierno municipal de Barcelona alegó razones de «descanso vecinal, orden público y seguridad» para justificar esta medida.

A pesar de ello, la ‘Plataforma Barcelona con la Selección’ decidió poner una pantalla gigante en la plaza de Cataluña para seguir en directo el duelo España-Italia y que contó con la oposición de la Policía que contaba con «órdenes de arriba».

La respuesta del Consistorio por saltarse esta censura fue implacable: 3.300 euros de sanción.

5. Se prohíbe atar a los perros más de dos horas

Otra medida que no deja indiferente a nadie es la de prohibir dejar atados a los perros de Barcelona durante más de dos horas, y dejando sólo una para los cachorros.

El equipo de Colau también dio la orden de que estas mascotas no pudieran pasar más de doce horas solos en sus hogares, aunque los gatos sí que podrían estarlo hasta tres días.

4. Que los vecinos dialoguen con los okupas del barrio de Gràcia

A finales del mes de mayo se produjeron una serie de disturbios en el barrio de Gràcia por el desalojo de varios okupas del ‘Banc Expropiat’, en los que tuvieron que intervenir los Mossos d’Esquadra y la Guardia Urbana.

A pesar de ello, Colau rechazó aprobar una declaración institucional de urgencia propuesta por el PP en el Consistorio  en el que se condenaban los actos de vandalismo que estaban teniendo lugar, negándose de esta forma a apoyar también a las fuerzas de seguridad.

Pero los hechos no se quedaron ahí, puesto que la alcaldesa se lavó las manos al proponer que las asociaciones de vecinos dialogasen con los okupas para intentar resolver el conflicto, puesto que el Consistorio había «fracasado» como interlocutor a la hora de solucionar el conflicto.

3. Protección a los ‘manteros’ de la ciudad

A principios del mes de marzo, el equipo de Colau decidió activar un plan de empleo para los vendedores del ‘top manta’ de Barcelona, pudiendo acceder también a estos puestos de trabajo aquellos manteros en situación irregular y que estuvieran empadronador en la ciudad condal antes de julio de 2015.

Este plan también les permite contar con una tarjeta de residencia en la ciudad, facilitando de esta manera su acceso a los servicios municipales.

Sin embargo, poco después tanto la Policía Local como la Guardia Urbana registraron ataques a varios de sus efectivos protagonizados por algunos ‘manteros’ y con la permisividad de Ada Colau.

2. Playas sin socorristas

El Gobierno municipal de Barcelona decidió en marzo prescindir de los servicios de la Cruz Roja, entidad que se encargada de la protección y supervisión de las playas de la ciudad desde hace años, por lo que sacaron a concurso dicha gestión y cuyo contrato fue adjudicado finalmente a Proactiva.

Sin embargo, el personal de la Cruz Roja inició una serie de protestas que propiciaron que el Consistorio finalizase este conflicto on la subrogación por parte de la nueva empresa de los socorristas que se quedaban sin trabajo.

Poco después, un sindicato presentó un recurso administrativo por el proceso, según informó el propio Ejecutivo de la ciudad al grupo municipal popular, por lo que Colau optó por paralizar el procedimiento dejando a las playas sin socorristas.

1. El Himno «erótico» catalán

Colau destinó 29.000 euros de las arcas públicas del Ayuntamiento de Barcelona a subvencionar un concierto cuyo finalidad era demostrar que el himno catalán, Els Segadors, proviene de una canción erótica del Siglo XVIII.

OKDIARIO tuvo acceso a las facturas que acreditaban el coste total del concierto que tuvo lugar el 11 de septiembre de 2015, día de La Diada y que los independentistas catalanas utilizan siempre para reclamar el Estado propio catalán.